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Recursos Humanos 2018: Perspectiva futura

¿Qué recursos humanos nos gustarían para la próxima década? En 1998 se hicieron esta pregunta y ahora desde «Workforce Management» se ha solicitado a un grupo de ejecutivos de RRHH y de líderes, que hagan sus mejores predicciones.

Un grupo de expertos en Recursos Humanos procedentes de empresas como SAP, Yahoo y Ernst & Young, entre otras, además de profesores de diversas universidades americanas, reunidos por el grupo editorial «Workforce Management», piensan que las empresas se transformarán de aquí al año 2018.

Según este panel de expertos, las nuevas tecnologías y las redes sociales harán que el trabajo sea más transitorio, se realice por equipos móviles y flexibles compuestos de personas internas y externas a la empresa, y los “freelance” comenzarán a ganar enteros.

La tecnología seguirá avanzando y los lugares de trabajo serán muy diferentes en 2018 respecto a cómo son ahora. El teléfono quedará trasnochado y serán los SMS y el correo electrónico las dos principales vías de comunicación para trabajar.

De hecho, colaboración y relaciones serán dos de las palabras que más van a sonar en los lugares de trabajo en los próximos dos lustros. Eso sí, esos lugares van a estar cada vez más alejados física y geográficamente, aunque tecnológicamente muy unidos y conectados. El trabajo viendo las caras de los compañeros podría estar en peligro de extinción, ya que los contactos cara a cara van a ser cada vez más escasos.

Estos hechos obligarán a que los directivos se planteen su estrategia de liderazgo: tendrán que flexibilizarse y dejar de lado el “ordeno y mando” para empezar a trabajar en ambientes más colaboradores y horizontales. El panel adelanta también que la responsabilidad corporativa y el liderazgo ético serán claves en las empresas durante los próximos diez años.
Los expertos participantes mostraron puntos de vista dispares sobre el efecto que tendrá la llegada de la Generación Y, o trabajadores del “milenio” (los nacidos en los años 80), al mundo laboral. Algunos pronostican que contribuirán a que los límites entre vida privada y vida laboral se diluyan. Otros, sin embargo, anticipan que la presencia de este grupo no tendrá grandes repercusiones y que la gente con talento seguirá trabajando duro y prosperará en las organizaciones.

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